Hacía ya tiempo que no hacía un viaje, y menos aun, que no lo traía aquí al blog y después de 12 días sin escribiros y después de dos semanas del nombrado viaje, hoy os lo cuento todo.
Me fui el día 8 de este mismo mes, y era el primer sábado de las vacaciones de Semana Santa, es decir, un día antes del Domingo de Ramos...
Fue un viaje de ida y vuelta, saliendo de la ciudad de Badajoz a las 7:30 de la mañana (que aun no estaban puestas ni las calles) y llegando a las 12 del mediodía.
Era un viaje por libre, es decir, no había guía, no había nada, solamente tu enfrentandote a la ciudad solo, ¿y por qué digo esto? porque si señores, hacía ya un montón de años que no iba a Sevilla y no me conocía la ciudad, por suerte mi agradable compañía si que se lo conocía.
Estuve viendo la catedral, el ayuntamiento, las setas de Sevilla, la Plaza de España, el parque de María Luisa... Vamos, lo que vendría siendo haciendo turismo de toda la vida.
Así, como viene siendo de costumbre, no solo os voy a contar lo que vi y aquí acabamos el post, no, ahora toca los detalles, cositas que me había pasado por allí...
Yo soy una persona, que como me saquen de mi casa, me ocurren cosas extrañas, y como no, en Sevilla no iba a ser menos, y me encontré gente extraña preguntando por puertas en plena calle, gente vendiendo cosas raras, gente que no te esperas que vas a encontrar y pum, de frente te viene...
Y como no, cuidad ajena, turismo... pues toca comprar, ya sea un recuerdo, un antojo o comida y efectivamente caí en esos tres aspectos.
Me compré un bolígrafo que pone Sevilla, que es muy bonito y muy baratungo, también compré una libretita mas pequeña que una mano, una libretita que también es bastante pequeña pero de posits y unos clips de tamaño gigante, que pueden ser tres veces mas grande que uno de tamaño normal.
De cositas de papelería, ya hemos acabado y luego fui a la famosa tienda entre los gurús y gente vegana de moda y esa es... la tienda lush y allí también me compré una gelatina de ducha y una crema para las manos, que ojo, la crema era benéfica.
Y por últimas compras, que son las que mas me gustan, comprando comida (como buena amante de la comida que soy) me compré: un helado y una hamburguesa en el burger king y otra hamburguesa en el mcdonals, un granizado en una tienda de cuyo nombre no me acuerdo y pasé también por el taste of america y allí compre y probé los maravillosos reeses y por último, una seta del supermario que es como un pastillero y es súper bonito.
Nada mas y nada menos este fue el viaje a Sevilla, ¿repetiría? por supuesto :)))
Yo chuleando en la torre del oro.
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